06 agosto 2006

Comisión relampago

Entiendo que la inmensa mayoría de las personas que vivimos de un sueldo intentemos amarrar como sea nuestro puesto de trabajo, por que vivimos de el y no tenemos otra cosa, pero que los políticos no asuman ninguna responsabilidad cuando mueren 43 personas en un accidente de la linea 1 del metro de Valencia, asumiendo que los responsables políticos del Gobierno Valenciano y la gerencia de Ferrocarrils de la Generalitat están libres de toda responsabilidad política, que la única causa del accidente fue el exceso de velocidad atribuible al conductor fallecido, obviando cualquier responsabilidad en que la linea 1 es la mas antigua y que los sistemas de seguridad de la misma son mas antiguos que los de las demás lineas, que los sindicatos habían reclamado más seguridad y sobre todo que si administras hay que apechugar con las duras y las maduras.

La dimisión en política es un gesto de dignidad.

No se si algún responsable del área tendrá estomago de comunicar a las familias de las victimas que todo se debió al azar y a la mala suerte, que todo en la linea 1 era idílico, un ejemplo de seguridad e inversiones para su modernización, si lo hace tiene mucho valor y muy poca vergüenza.

Cuando se acepta un cargo político o de responsabilidad, la dimisión debería ser asignatura obligada aunque solo sea por dignidad y en este caso,respeto hacia las victimas.


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