27 octubre 2006

Malos tiempos para la Lírica.......

Batasuna por voz de Joseba Permach, se muestra sorprendido por la gravedad con que ha sido acogido el robo de armas, presumiblemente por parte de ETA en Francia y les parece mucho más grave la operación contra las herriko tabernas.

Extraños los procesos mentales de esta gente de batasuna, se sorprenden que nos parezca grave que ETA robe mas de 300 armas, (armas con las que se puede matar a gente, al fin y al cabo esa es su única utilidad, disparar proyectiles que matan si te dan), y no se despeinan para nada cuando dicen, tan serios y consecuentes, que no tienen previsto condenar la violencia.

Gente rara, rara.


Rush Limbaugh, el periodista de radio de más audiencia de EEUU, ataca a Michael J. Fox por aparecer en un anuncio apoyando a un candidato demócrata por su postura favorable a la investigación con células madre. Dice que estaba actuando o que había dejado la medicación para aumentar los temblores. Fox es un enfermo de Parkinson. Supongo que el actor está obligado a morirse calladito y no molestar a los telepredicadores de la derecha. (Leer más en Guerra Eterna)

Hay que se una rata rastrera para llevar la política a este terreno, Michael J. Fox no tiene bastante con su lucha diaria con el Parkinson, también tiene que escuchar a descerebrados con electroencefalograma plano en inteligencia, como este tipo.

¿Por que será, que a todos estos "defensores de la vida" y acérrimos enemigos de la investigación con células madre, para salvar vidas de enfermos, cuando les pilla el toro de la enfermedad cambian de opinión?

Si la política es esto junto a la comunicación directa con Dios a la hora de tomar decisiones, que se pare el mundo que yo me bajo.


Leo que Vladímir Putin envidia al presidente de Israel porque es un machote.

Demencial, ¿pero que gente gobierna en este planeta?

Un poquito de cordura, cuanto bien haría.

14 octubre 2006

¿Humanos, que es eso?

Hoy es sábado y una pereza espesa me envuelve, y no tengo ganas de hacer nada que no sea divertirme y comenzar a invernar, por eso he vuelto a leer este texto tan divertido y tan desmitificador, en un mundo como en el que vivimos, que quien mas o quien menos esta seguro de poseer la verdad absoluta, este relato nos baja del pedestal y de paso nos reímos.

La pesadilla del Teólogo

El eminente teólogo doctor Thaddeus soñó que estaba muerto y se dirigía al cielo. Sus estudios le habían preparado y no tuvo ninguna dificultad para encontrar el camino. Llamó a la puerta del cielo y se encontró con un escrutinio más meticuloso de lo que esperaba.

-Solicito la admisión -explicó- porque he sido un hombre de bien y he dedicado mi vida a la gloria de Dios.

-¿Hombre? -dijo el portero-. ¿Qué es eso? Y ¿cómo es posible que una criatura tan ridícula como tú haga algo para promover la gloria de nadie?

El doctor Thaddeus se quedó perplejo.

-No es posible que desconozcas al hombre. Debes saber que el hombre es la obra suprema del Creador.

-Lamento herir tus sentimientos -dijo el portero-, pero lo que dices es nuevo para mí. Dudo que nadie de los que estamos aquí haya oído jamás hablar de esa cosa que llamas "hombre". Sin embargo, puesto que pareces afligido, tendrás la oportunidad de consultar a nuestro bibliotecario.

El bibliotecario, un ser globular con mil ojos y una boca, bajó algunos de sus ojos hacia el doctor Thaddeus.

-¿Qué es eso? -le preguntó al portero.

-Eso dice ser miembro de una especie llamada "hombre" que vive en un lugar de nombre "Tierra". Tiene la curiosa idea de que alguien se interesa especialmente por ese lugar y esta especie. Pensé que quizá podrías ilustrarle.

-Bueno -dijo amablemente el bibliotecario al teólogo-, tal vez puedas decirme dónde está ese sitio que llamas "Tierra".

-Forma parte del Sistema Solar.

-¿Y qué es el Sistema Solar? -preguntó el bibliotecario.

-Pues.. -replicó el teólogo- mi campo era el conocimiento sagrado y lo que preguntas pertenece al conocimiento profano. No obstante, he aprendido lo suficiente de mis amigos astrónomos para poder decirte que el sistema solar forma parte de la Vía Láctea.

-¿Y qué es la Vía Láctea? -preguntó el bibliotecario.

-Es una de las galaxias, de las que, según me han dicho, existen unos cien millones.

-Bueno, bueno -dijo el bibliotecario-. No esperarás que recuerde una entre un número tan elevado. Pero sí recuerdo haber oído antes la palabra "galaxia". De hecho, creo que uno de nuestros bibliotecarios auxiliares está especializado en galaxias. Llamémosle y veamos si puede ayudarnos.

Poco después se presentó el bibliotecario auxiliar galáctico, que tenía la forma de un dodecaedro. Era evidente que en otro tiempo su superficie había sido brillante, pero el polvo de los estantes le había vuelto mortecino y opaco. El bibliotecario le dijo que el doctor Thaddeus, al esforzarse por explicar su origen, había mencionado las galaxias, y confiaban en que sería posible obtener información al respecto en la sección galáctica de la biblioteca.

-Bueno, -dijo el bibliotecario auxiliar-, supongo que sería posible con el tiempo, pero como hay cien millones galaxias y a cada una le corresponde un volumen determinado. ¿Cuál desea esta extraña molécula?

-Es la galaxia llamada Vía Láctea -dijo titubeante el doctor Thaddeus.

-De acuerdo -concluyó el bibliotecario auxiliar-. Lo encontraré, si es que puedo.

Unas tres semanas después regresó y dijo que el fichero extraordinariamente eficaz de la sección galáctica le había permitido localizar la galaxia como la número QX 321.762.

-Hemos empleado a los cinco mil funcionarios de la sección galáctica en esta investigación. ¿Desea ver al funcionario encargado especialmente de la galaxia en cuestión?

Llamaron al funcionario, que resultó ser un octaedro con un ojo en cada superficie y una boca en una de ellas. Estaba sorprendido y deslumbrado al verse en una región tan brillante, lejos del umbrío limbo de sus estanterías. Se sobrepuso y preguntó con timidez:

-¿Qué desean saber acerca de una galaxia?

El doctor Thaddeus se lo explicó:

-Quiero informarme sobre el Sistema Solar, una serie de cuerpos celestes que giran alrededor de una de las estrellas de su galaxia. La estrella en cuestión se llama "Sol".

Hum -dijo el bibliotecario de la Vía Láctea-. Ha sido bastante difícil encontrar la galaxia precisa, pero encontrar la estrella precisa en la galaxia es mucho más difícil. Sé que hay unos trescientos mil millones de estrellas en la galaxia, pero mis conocimientos no me permiten distinguir una de otra. Creo, sin embargo, que cierta vez la administración pidió la lista completa de los trescientos mil millones de estrellas y sigue guardada en el sótano. Si cree que merece la pena, emplearé a un grupo especial del Otro Lugar para que busquen esa estrella en particular.

Convinieron que, como la cuestión se había planteado y era evidente que el doctor Thaddeus estaba angustiado, siendo en principio interesante que un ser tan rudimentario se presentase de improviso, sería lo mejor que podían hacer.

Varios años después, un tetraedro muy cansado y desalentado se presentó ante el bibliotecario auxiliar galáctico y le dijo:

-Por fin he localizado esa estrella particular sobre la que se han pedido informes, pero no entiendo por qué ha despertado el menor interés. Tiene un gran parecido con muchas otras estrellas de la misma galaxia. Es de tamaño y temperatura medios y está rodeada por otros cuerpos mucho más pequeños llamados "planetas". Tras una minuciosa y microscópica investigación, he descubierto que por lo menos algunos de esos planetas tienen parásitos, y creo que esta cosa que ha solicitado los informes debe de ser uno de ellos.

Al llegar a este punto, el doctor Thaddeus rompió en un apasionado e indignado llanto:

-¿Por qué, decidme, por qué el Creador nos ocultó a los pobres habitantes de la Tierra que no fuimos nosotros quienes le incitaron a crear los Cielos? Durante mi larga vida le he servido con diligencia, creyendo que se fijaría en mis servicios y me recompensaría con dicha eterna. Y ahora parece que ni siquiera tenía conocimiento de mi existencia. Me decís que soy un animalículo infinitesimal en un pequeño cuerpo que gira alrededor de un miembro insignificante de un grupo formado por trescientos mil millones de estrellas, que sólo es uno entre muchos millones de tales grupos. ¡No puedo soportarlo, y ya no me es posible adorar a mi Creador!

Muy bien -dijo el portero-. Porque no hay ningún Creador que adorar, ya que la ilimitada cavidad del Universo es eterna, nada la creó, y todo lo que ves no ha surgido más que de la combinación aleatoria entre los elementos primordiales. Aunque tú, triste homúnculo, en el Gran Libro de la Naturaleza, debes de ser una insignificante errata, con la que no deberíamos haber perdido ni un ápice de nuestra enorme duración temporal.

En aquel momento se despertó el teólogo.

El poder de Satán sobre nuestra imaginación, durante el sueño, es aterrador -musitó.

Bertrand Russell



Feliz fin de semana y ya sabes, los sueños sueños son, ¿o no?, aplícate al cuento.........


09 octubre 2006

¿Sanidad y Educación para todos?

Propuestas como la del PP en su conferencia “Más libertad, más legalidad, más bienestar para hacer frente al fenómeno de la inmigración irregular”, de limitar el empadronamiento solo a los inmigrantes con permiso de residencia, convertiría a todas las personas sin permiso de residencia en un colectivo sin derecho a la sanidad y a la educación de los menores hundiéndolos un paso más en la marginación y la invisibilidad.

Parece ser que al PP le importa un pepino el bienestar de las personas, no ve ningún problema en que personas sin recursos no tengan derecho a la sanidad y que sus hijos no puedan disfrutar de una educación adecuada a su edad, que les convierta en ciudadanos informados y formados.

Como siempre me llama la atención el título de la conferencia, “Mas Libertad”, ¿libertad para quien?, para los que pueden elegir sin problema la educación de sus hijos en el colegio “X”, financiado por todos nosotros gracias a los conciertos en educación que permiten que entidades jurídicas cuadren las cuentas gracias al erario público, mientras los Colegios Públicos tienen cada vez mas carencias que las autoridades políticas de las que dependen no solucionan y libertad para que podamos elegir cualquier seguro de enfermedad privado de alguna empresa que tendrá conciertos con la sanidad pública que le engrosara las cuentas anuales gracias a los impuestos de cada uno de nosotros.

Lo de la “Legalidad” lo pasamos por alto, no creo que nadie estemos en contra de la legalidad vigente, ¿o sí?, ¿tal vez no les guste la que hay y les gustaría otra legalidad?.

Lo mejor de todo es “más bienestar”, ¿para quien?, para todas esas personas que no tendrían derecho a la sanidad, para todos esos niños que se quedarían sin educación.

Entiendo que todos estos servicios públicos nos cuestan mucho dinero y que la estúpida obsesión de todos los partidos políticos que llegan o quieren llegar al poder de recortar impuestos, les hipoteca las decisiones futuras y luego les cuesta mucho sostener unos servicios públicos aceptables, pero que son imprescindibles, pero buscar el ahorro dejando sin servicios a los mas necesitados es como mínimo inmoral y más, cuando no tienen problemas en donde gobiernan en gastarse lo que haga falta para perpetuarse en obras faraónicas de dudosa utilidad.

Es un concepto de vida, pero no es el mío.



Cornelius Phlox.